El 1 de marzo de 2018 la empresa rusa Gazprom se negó a cumplir con su compromiso de suministrar volúmenes de gas que ya fueron pagos, a Ucrania. Simultáneamente se redujo la presión del gas a la entrada de gasoductos ucranianos en un 20%. Esta situación provocó una carga adicional al sistema ucraniano de transporte de gas y creó un serio riesgo técnico para su operación. Como si esto fuera poco, el 2 de marzo Gazprom anunció su decisión de retirarse de los contratos de suministro del gas firmados en 2009.

Estas decisiones del monopolista ruso evidencian la intención del Kremlin para volver a usar el gas natural como una herramienta política con el objetivo de socavar la seguridad de los suministros de gas para Europa, lo cual adquiere un cinismo especial en las condiciones actuales de temperaturas extremadamente bajas en Ucrania y en toda Europa. Además, esto representa un claro abuso de la posición dominante del Gazprom en el mercado gasífero europeo, haciendo Ucrania y los países europeos otra vez rehenes de los juegos sucios de Moscú.

Las mencionadas acciones de Gazprom, su menosprecio de las obligaciones asumidas bajo contratos comerciales, demuestran claramente que dicha empresa rusa no puede ser considerada como un socio confiable.

En estas circunstancias, Ucrania formuló una solicitud a la Comisión Europea para facilitar de manera inmediata la realización de consultas trilaterales en el formato Ucrania-UE-Rusia. También se solicitó aplicar el Mecanismo de aviso temprano (“Early warning mechanism”) según establecido por el Artículo 340 del Acuerdo de Asociación entre Ucrania y la Unión Europea.

El Gobierno Ucraniano y la empresa pública Naftogaz harán todo que esté a su alcance para cumplir de buena fé con sus obligaciones contractuales y las decisiones del Tribunal de arbitraje de Estocolmo del diciembre de 2017.

A pesar de todas las dificultades técnicas causadas por dichas acciones de la empresa rusa, Ucrania es y seguirá siendo un socio confiable de Europa en materia energética, asegurando el suministro seguro e ininterrumpido del gas natural a los países de la Unión Europea. La Parte Ucraniana también usará todos los instrumentos disponibles para obligar a Gazprom a cumplir con sus compromisos legales y a indemnizar por los daños causados por su violación.

Tomando en cuenta la situación creada por las acciones irresponsables de Gazprom, totalmente controlado por el Gobierno ruso, en Ucrania se puso en acción el plan de contingencia que preveía, además de compras de volúmenes adicionales de gas a empresas europeas, la reducción de consumo interno, el uso de combustibles alternativos, el cierre provisional de algunas escuelas y universidades, entre otros. Al mismo tiempo, Ucrania se ha dirigido a sus socios europeos para evaluar los objetivos reales de los proyectos como “Nord Stream 2” y similares, así como para tomar todas las medidas necesarias, en los niveles nacional y europeo, comercial y gubernamental, legislativo y político, para prevenir la repetición de semejantes situaciones en el futuro.

Esperamos que la presión mancomunada de la comunidad europea e internacional sea capaz de obligar al monopolista gasífero ruso y al Kremlin a poner fin a su chantaje energético y volver a los marcos establecidos por la ley, los contratos en vigor y sus obligaciones asumidas.

 

Embajada de Ucrania en la República Argentina

2 de marzo de 2018