CIEN AÑOS DE LA DIPLOMACIA UCRANIANA Y LAS RELACIONES UCRANIANO-ARGENTINAS
El año en curso se cumple el centenario del inicio de la Revolución nacional ucraniana de 1917-1921, uno de los períodos más importantes y complejos de la historia de nuestra milenaria Nación, cuando fue formada y existió durante algunos años la República Popular de Ucrania (UNR, según las siglas en ucraniano). Luego del desmoronamiento del Imperio ruso en febrero de 1917 a raíz de la caída del régimen zarista después de la Primera Guerra Mundial, Ucrania, después de varios siglos de dominación extranjera, finalmente obtuvo la oportunidad de proclamar su independencia.
Uno de los eventos más importantes de este período fue la fundación del servicio diplomático ucraniano. Hace exactamente 100 años, el 22 de diciembre de 1917, se aprobó la Ley sobre el Establecimiento de la Secretaría General para Asuntos Internacionales, la primera estructura estatal completa del servicio exterior de Ucrania.
Entre los años 1918 y 1921, fueron establecidas las embajadas en Alemania, Austro-Hungría, Turquía, Bulgaria, Suiza y Finlandia, dos misiones en Rumania y Suecia. Al mismo tiempo en la UNR llegaron a establecer sus sedes más de veinte misiones diplomáticas de varios países extranjeros (Austro-Hungría, Bulgaria, Georgia, Alemania, Turquía, Polonia, Rumania, Finlandia y otros).
El gobierno de la UNR formó una delegación especial para las conversaciones de paz con Rusia. Las negociaciones con la delegación rusa se llevaron a cabo en Kyiv del mayo hasta octubre de 1918. Además, la delegación de la UNR participó en la Conferencia de Paz de París, mientras desempeñaba la función de una oficina de representación diplomática temporal de Ucrania en Francia.
Un hecho histórico interesante que generalmente es poco conocido son los contactos que aquel primer servicio diplomático ucraniano llegó a tener los contactos oficiales con su homólogo de la Argentina. Según los documentos históricos, el 15 de enero de 1921, el conde Mykhaylo Tyshkevych, quien era el jefe de la delegación de la UNR a la conferencia de paz de París, se dirigió al embajador argentino en Francia, D.Marcelo Torcuato de Alvear, con una propuesta a su capital de reconocer la independencia de la UNR. La respuesta no se hizo esperar: ya en pocas semanas el embajador argentino informó en París que había recibido de Buenos Aires una nota telegráfica, donde se decía: “El Gobierno Argentino con su decreto del 5 de febrero ha reconocido a Ucrania como un estado independiente. Informar a la delegación de Ucrania”. De esta manera, la República Argentina se convirtió en el único país latinoamericano que reconoció la UNR y aceptó establecer relaciones diplomáticas con aquel país.
Desafortunadamente, a pesar de que en julio del mismo año fue nombrado el embajador de la UNR en Argentina, Sr. Mykola Shumytskyi, quien inclusive logró arribar desde París a Buenos Aires, no se hizo posible establecer una misión diplomática permanente de aquella Ucrania en la capital argentina. La República Popular Ucraniana no pudo resistir y poco tiempo después sucumbió frente al avance de las hordas ruso-bolcheviques y Ucrania volvió a perder su independencia, siendo obligada a formar parte de la Unión Soviética por 70 años. Por consiguiente, durante largo rato Ucrania estuvo privada de la capacidad de definir y plasmar su propia política exterior.
Después de la Segunda Guerra Mundial, como estado-fundador de la ONU, Ucrania, que era en aquel entonces una de las 16 repúblicas de la URSS, participó en la elaboración de la Carta de las Naciones Unidas, la formación de la estructura, organismos e instituciones de la mayor organización internacional. En los años 1940-1950 la RSS de Ucrania se convirtió en un miembro de varias organizaciones internacionales (la Corte Internacional de Justicia, la Organización Mundial de la Salud, la Unión Postal Universal, la Organización Internacional del Trabajo, la UNESCO, entre otras).
En los bienios 1948-1949 y 1984-1985, Ucrania fue elegida como miembro no permanente del Consejo de Seguridad de la ONU. Sin embargo, apenas después de reconquistar la Independencia nacional en 1991, la diplomacia ucraniana ha renacido como un actor importante de las relaciones internacionales. El papel protagónico de nuestro país en la solución de problemas y controversias del orden global fue claramente evidenciado durante dos períodos de participación de la Ucrania independiente (2000-2001 y 2016-2017) en los trabajos del Consejo de Seguridad como miembro no permanente.
Durante los 26 años de la independencia, los diplomáticos ucranianos han hecho un aporte considerable a la consolidación del Estado Nacional y la protección de la soberanía y la integridad territorial de Ucrania. En la actualidad, Ucrania mantiene las relaciones diplomáticas con más de 180 países del mundo. La adhesión de nuestro país a la OSCE, el Consejo de Europa, la OMC y otras organizaciones internacionales importantes, al igual que la conclusión del Acuerdo de Asociación con la Unión Europea y la abolición de visados para los viajes de ciudadanos ucranianos a 30 países europeos, están entre los principales logros de la diplomacia ucraniana de los últimos años.
En las condiciones de la agresión y la guerra híbrida desatada por la Federación de Rusia contra nuestro país, los diplomáticos ucranianos están en la primera línea de la defensa de la soberanía, integridad territorial e independencia de Ucrania. Gracias a sus esfuerzos, ha sido posible asegurar el apoyo político y práctico a Ucrania por parte de la comunidad internacional que se transmite a través de las resoluciones pertinentes de la ONU y de otras organizaciones internacionales, la introducción y el mantenimiento de duras sanciones políticas y económicas contra el Estado agresor, la adhesión de la comunidad internacional a la política de no reconocimiento de la anexión ilegítima de Crimea.
Ucrania y la República Argentina
La República Argentina fue el primer país latinoamericano en reconocer la independencia de Ucrania el 5 de diciembre de 1991, apenas 4 días después del referéndum en el cual más de 90% de los ciudadanos ucranianos votaron a favor de una Ucrania libre, soberana e independiente. La Argentina también fue el primer país de la región en establecer las relaciones diplomáticas oficiales con nuestro país el 6 de enero de 1992.
La Embajada de Ucrania en Buenos Aires abrió sus puertas en marzo de 1993, en gran medida gracias a los esfuerzos de la colectividad ucraniana residente en la Argentina que apoyó muchísimo esa primera misión diplomática ucraniana en la etapa inicial de su organización y funcionamiento, mientras que la Embajada argentina en Kyiv empezó a funcionar en mayo del mismo año.
Desde los primeros días se iniciaron los contactos políticos entre los dos estados que se han ido multiplicando a lo largo de los años. En la primera década tuvo lugar el intercambio de visitas presidenciales, mientras los Cancilleres de los dos países, además de intercambiar visitas oficiales, en el transcurso de esos años celebraron una serie de reuniones bilaterales en los marcos de organismos internacionales. Desde hace varios años entre nuestros países existe el mecanismo de consultas políticas bilaterales a nivel de vicecancilleres.
Nuestros países comparten los valores universales y las posiciones de principio en cuestiones claves de la paz y seguridad internacional como el respeto al derecho internacional, la protección de los derechos humanos y libertades fundamentales, la no injerencia en los asuntos internos y el respeto a la soberanía nacional de los pueblos.
En conclusión, puedo afirmar que, al cumplirse 100 años de la creación del primer servicio exterior ucraniano, los diplomáticos de la Ucrania contemporánea, como fieles herederos de la diplomacia de la República Popular de Ucrania, siguen defendiendo profesionalmente los intereses nacionales de nuestro país.
Al mismo tiempo, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Ucrania, preservando las tradiciones históricas y aprendiendo las mejores experiencias de escuelas diplomáticas del mundo, se está desarrollando con el objetivo de convertirse en un servicio exterior moderno, del siglo XXI, que pueda reaccionar y dar respuestas adecuadas a los desafíos globales de nuestros tiempos.
Yurii Diudin
Embajador de Ucrania en la República Argentina